Estas son las normas que, como mandatos aspiracionales y de propósito rigen en lo principal, el comportamiento del conjunto de servidores públicos de la entidad:
- Respeto por las personas y por los recursos públicos.
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Integridad en el comportamiento de las personas y de las organizaciones (coherencia entre lo que se piensa, se dice y se hace).
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Confianza interpersonal e institucional.
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Compromiso con la misión y el Plan Estratégico Institucional.
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Justicia en el sentido de la acción.
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Transparencia en las decisiones y en el quehacer.
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Eficiencia en el resultado de la gestión.
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Participación en las decisiones y en la gestión de lo público.
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Solidaridad en las decisiones por los más vulnerables.